lunes, 10 de mayo de 2010

Sumergido en un Huracán Negro

Escuchar el susurro perpetuo de la noche,
Parece tontería en este mundo de gris,
Vestido, pintado, sepultado y olvidado,
Pasado por falso y enterrado en miseria,
Miseria perpetua de un mundo sin corazón
Esperando el amanecer, en el sueño perdido,
Quizás en un nuevo camino veré el sol salir
Y a mi lado estés, y entonces no van a importar
Ni los colores ni las banderas ni las iglesias,
Si todos queremos lo mismo,
¿Acaso porque nos dividimos?

A vista de todos el tablero de ajedrez
Y que importa mientras yo esté bien,
Su poder no me deja ver,
Pero mis sueños nunca olvidaré,
Nunca olvidaré ninguno de los rostros,
Nunca renegare de las mil semillas
Que algún día al cielo mandé,
Alrededor la miseria se puede ver,
Qué situación tan injusta,
Qué sociedad tan ridícula.

En el horizonte sin nombre,
Por donde se llega a la eternidad,
Viaje para buscarte,
Pero jamás llegue a encontrarte,
Versos perdidos en la inmensidad del infinito,
Cargado del dolor de siglos
Y de la miseria artificial que hemos construido,
Nos hemos inventado una gran máquina de terror
Y ahora no sabemos cómo escapar,
Nos hemos olvidado de la verdad.

Y lejos veo aquellos ojos sabios
Y muy lejos veo los símbolos sagrados,
Mi camino hoy no conspira a mi favor,
La duda y la trampa me opacan con mentiras,
Quiero caminar, quiero interpretar
Pero lejos se encuentra el comienzo
Mis pasos, como huellas en la arena
Han desaparecido y no las he comprendido,
Empezar de nuevo, gateando desde el principio,
Noche oscura canción confusa
Y gritos de dolor en nombre del placer,
Sin sentido me encuentro sumergido en un huracán negro.

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