El sonido de la ciudad,
Lamento infernal,
Gran rugido de destrucción,
La pureza se va y el agua contaminada,
Empieza a llorar.
En un mundo futuro,
En un mundo fortuito,
El caos y el silencio,
...Y el misterio... Y el horror.
La desesperación va creciendo,
Pero todo es de un mismo color,
De pronto se escucha una lenta melodía,
Un punto en el cielo que empieza a brillar.
No pienses este momento solo llegará,
Pero el cambio y la vida están pidiendo tu actuar,
No es nada mágico, es tu propia acción,
Reflexión… sobre tu mundo agónico.
Es la magia más bella, aquella que nos va a salvar,
De las tinieblas surgen raíces,
Una semilla necesita oscuridad,
Necesita en la profundidad germinar
Toda la vida se intenta maquinizar,
Cada movimiento esperado será,
Cotidianidad, te atrapa
Y como un niño
En la noche sientes miedo,
En el día tu mente ocupas,
Disimulada, pero esclava es tu voluntad.
Supongo que algún día no vas a querer seguir,
Respirando aquel humo tedioso,
Que no deja observarte,
Vas a querer volver a ti,
Levantar un millón de voces,
Salir de esa putrefacta actualidad,
Volver a sentir, llegar a soñar,
Soñar con soñar…
Que anhelo tan inmenso,
Que punto tan recóndito,
Sin pensar que tan cerca esta,
En la oscuridad debes luchar
Para conseguir que el sol vuelva a salir.
No será la magia, será tu propia acción,
Aquella que determine la interrupción,
De esa calamidad, maquinaria agonizante,
Que destruye sin pensar,
Tienes que gritar tienes que luchar,
Para conseguir que del sol todo vuelva a brotar.
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